El proyecto busca aumentar los grados de libertad, manipulación e intervención del usuario- habitante-ciudadano. Se generan una serie de cintas en las que se va alojando el programa de vivienda, tratando de buscar su orientación más favorable, y por el lado menos favorable las circulaciones discurren paralelas pero separadas. Ambas cintas se irán cruzando de manera que se puedan considerar un lugar de encuentro y relación entre los usuarios. Frente a un exterior que aparece con una presencia tranquila, y un tratamiento neutro en el color, el paisaje interior será un descubrimiento para el paseante, generando una topografía que permite circular interiormente bajo el edificio construido. Se atribuye un color a cada patio y a sus elementos, asociado a un tipo de vegetación autóctona que tapiza los taludes y espacios ajardinados interiores.
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